Luis J. Piriz
El partido debut de la selección uruguaya de fútbol ante Egipto en el mundial de fútbol Rusia 2018, tuvo 75 minutos de juego que indicaban un empate a cero por donde se le viera y que, contra todo pronóstico, Egipto daría la sorpresa y frenaría a Uruguay por llevarse la victoria, con el atenuante, además, de que su estrella máxima, Mohamed Salah, estuvo en el banco de suplentes, pero no fue de la partida, debido a la lesión de que fue objeto en la final de la Champions.
El primer tiempo, Uruguay equivocó los caminos: de Arrascaeta no acertaba una, sumado a que Vecino y Betancur no recuperaban balones en el medio campo y cuando lo hacían, generalmente estos iban a los pies de un rival, generando un hueco enorme entre el medio campo y los atacantes.
Y, por tanto, salvo dos jugadas que tuvo Suárez, no se vio mucho más de Uruguay, lo que, sumado a un par de disparos del centro delantero egipcio, hizo que la primera mitad se fuera con más preguntas que respuestas.
En el segundo tiempo, Uruguay pareció llevarse por delante a Egipto y Suárez al minuto, tuvo un mano a mano con el goalkeeper que malogró. Y Egipto, que tenía mejor manejo del balón, se las arreglaba para contragolpear, pero no tuvo eficacia para definir.
Y Uruguay movió las piezas: ingresó Sánchez por Nandez y Cristian Rodríguez por de Arrascaeta, dando mejor tenencia del balón y mejor destino, ya que desde la vía del balón parado, Uruguay en los 15 minutos finales, lo metió a Egipto en su área: a los 87′, Cavani estrelló un disparo en el ángulo y dos minutos después, una patriada de Giménez por derecha, hace que le cometan falta, y desde esa pelota quieta, Sánchez envía un centro perfecto y el zaguero del Atlético de Madrid, la clava en el ángulo izquierdo del arco egipcio, haciendo que el goalkeeper sea un espectador más.
De ahí hasta el final, se vio a Egipto buscar el empate usando la vía aérea, sabedor de que sería la fórmula a utilizar, a falta de 6 minutos de descuento. Sin embargo, el resultado no cambió y Uruguay se llevó el triunfo, lo que sumado al triunfo un día antes de Rusia sobre Arabia Saudita 5-0, hace que el próximo partido de Uruguay ante los árabes, sea jugado con más soltura y menos presión por los puntos.
Para finalizar, Egipto juega muy bien al fútbol y creo que cuando se enfrente a Rusia, no le será fácil al anfitrión vencerlo, especialmente estando ya recuperado Salah, que, sin duda, será una pieza fundamental en el ataque egipcio; y por el otro lado, Uruguay tendrá a su frente a una selección árabe que es muy frágil en defensa por arriba y por abajo y que jugará éste encuentro sabedor del resultado Rusia-Egipto, por lo que posiblemente si logra el triunfo, ya juegue ante Rusia clasificado a octavos de final, restando saber si lo hace primero o segundo.
El debut ya pasó y no jugó bien Uruguay, pero embolsó los 3 puntos y eso sin duda hace que el ánimo para el próximo encuentro esté bien alto.
Pero para los de Salah… no salió nada.