Cristian Farinola

A los 21 años debutó en la Fórmula 1 con la escudería británica Willliams en ese “Templo de la Velocidad” que es el circuito de Monza. En Italia dejó elogios, récords y un futuro auspicioso. A puro coraje, reflejos y velocidad, el argentino Franco Colapinto sabe que está ante una oportunidad única. Tiene 8 carreras por delante que lo marcarán para siempre, pero vendrán muchas más. ¡¡¡“Fran” pide pista!!!

Su incorporación a la meca del automovilismo reemplazando al estadounidense Logan Sargeant para muchos fue un batacazo, pero dentro del ambiente automovilístico más exigente del planeta sabían de las condiciones y potencial del bonaerense oriundo del partido de Pilar. Como en la Premier League que busca jóvenes y talentosos para desplegar el mejor fútbol, la escudería británica no dudó en las condiciones de Franco Colapinto y lo sumó a su equipo. La joya del automovilismo argento no desentonó. “Fran” retorno la confianza que pusieron en él con un hermoso e inolvidable debut en el GP de Monza. El Pilarense dejó ver algunas de todas sus condiciones, esas que se empezaron a formar a los 11 años cuando corría con su Karting en los autódromos de Buenos Aires. En Monza largó en la posición 18, superó a varios hasta llegar al puesto 12, por detrás del español Fernando Alonso y a tan sólo dos posiciones de conseguir puntos para la tabla. Soñado debut en la Formula 1.

“Sabía que Monza me iba a ayudar a debutar. De las carreras que quedan, solo conozco Abu Dabi, así que ahora voy a ir conociendo los circuitos y creo que ya conocer el auto y al equipo es un paso adelante, dijo al término de su carrera y agregó: “Físicamente estuve bien, lo que más me costó es que tuve mucho dolor por el asiento. Estuve 1 hora y media en un asiento nuevo. Fue una carrera positiva. Ahora hay que preparar con los ingenieros y el equipo la próxima competición que será en Bakú”.

El jefe de equipo de la escudería Williams, James Vowles, se mostró satisfecho con el debut de Franco y lo felicitó. “Hizo una carrera fantástica. Lo que más me llamo la atención de Franco en su debut es que no tuvo miedo y se lo notó muy cómodo y feliz”, señaló Vowles que apostó por Colapinto en un momento en el que muchos a su alrededor querían al hijo de Michael Schumacher en ese lugar.

La velocidad máxima que alcanzó Colapinto en la carrera fue de 356,0 km/h, y solo fue superado por tres pilotos: El Haas-Ferrari de Kevin Magnussen (357,1 km/h) y los Aston Martin-Mercedes de Lance Stroll (356,5 km/h) y Fernando Alonso (356,2 km/h).

“He estado trabajando para estar en la Fórmula 1 desde que era muy joven, y esta oportunidad, nunca se sabe cuándo va a volver. Así que, por supuesto, voy a aprovechar la oportunidad. Voy a intentar hacerlo lo mejor posible”, remarcó Fran que se subió a un triciclo eléctrico a los 3 años en una juguetería y se enamoró. A los 11 debutó con su karting y a los 21 en la Formula 1.

Franco Colapinto sabe lo quiere. Está viviendo la realidad que soñó desde muy niño y construyendo una carrera sólida, constante, con creatividad, pero también con juicio, concentración y respeto. Su talento, hambre de gloria y entusiasmo están la vista de todos. Ya lo demostró en el debut y seguramente lo confirmará en las próximas carreras porque el ADN de “Fran” Colapinto es el automovilismo y está cargado de pasión, vértigo y velocidad.

Su próxima presentación será en el circuito callejero de Bakú, en el Gran Premio de Azerbaiyán, este domingo 15 de septiembre, el 22 lo hará en Singapur y el 20 de octubre en Austin, EE.UU.