Uruguay sacó la cara por Sudamérica al derrotar a Portugal 2-1 , en formidable partido jugado con un juego colectivo que nuevamente habla a las claras que el maestro Tabarez ha planificado los encuentros con total seriedad, sin subestimar a ningún rival, jugando cada pelota como si fuera la última, dejando el alma en cada trancada, que desde Muslera a Suárez, todos, absolutamente todos, estuvieron a la altura del partido, ya que de nada hubiera servido haber salido primero en su grupo, si hoy no se ganaba.
Y Uruguay hoy les demostró a aquellos que para vender publicidad veían campeón a Alemania, a Argentina, al propio “campeón” de Europa, Portugal y este pequeño grupo de uruguayos, que nadie de los “calificados” periodistas de las cadenas deportivas lo daban como candidato, que pisó fuerte en octavos, con respeto, pero sin miedo ante el inflado Portugal.
Edinson Cavani a los 7′ y 62′, convirtió el doblete del triunfo, empatando temporalmente Pepe a los 56′.
Bien por Uruguay, bien por Tabarez, un técnico que transmite confianza a sus dirigidos, que jamás gesticula ni va a protestar a los árbitros como otros tienen por costumbre.
Festejen orientales, se lo merecen por lo que hicieron en la cancha.
Y a pensar en Francia ahora, ya que no hay “cristiano” en Rusia.