Una plataforma de computación de alto desempeño, que tiene un poder superior a 10.000 procesadores tradicionales, comenzó a brindar servicios a investigadores y empresas del país. El equipo demandó una inversión de 500.000 dólares y está ubicado en el Datacenter de Antel, pero podrá ser utilizado desde cualquier punto del país. La ministra Carolina Cosse subrayó que es un paso más en la construcción de la industria del futuro.

En el lanzamiento del Centro Nacional de Supercomputación participaron la ministra de Industria, Energía y Minería, Carolina Cosse; el presidente de UTE, Gonzalo Casaravilla; el presidente de Antel, Andrés Tolosa; el rector de la Universidad de la República, Roberto Markarián; el presidente de la Agencia Nacional de Investigación e Innovación (ANII), Fernando Brum; la decana de Facultad de Ingeniería, María Simón, y Sergio Nesmachnow, responsable científico del proyecto.

El Centro Nacional de Supercomputación es capaz de realizar complejas operaciones matemáticas y de procesamiento de datos en pocos segundos y dispone de un poder superior a 10.000 computadores tradicionales. La inversión para su adquisición y puesta en funcionamiento alcanzó los 500.000 dólares. En el correr del próximo año, la inversión total por concepto de gastos de operación, personal técnico y amortización será del entorno del millón de dólares.

Sergio Nesmachnow explicó que el grupo de investigación involucra a investigadores de ingeniería, ciencias sociales, física, astronomía y también a las empresas Antel y UTE, que fueron socias fundadoras de esta iniciativa. La infraestructura fue financiada por la ANII, a través de su programa Grandes Equipos Científicos, y por la Universidad de la República, a través de la Comisión Sectorial de Investigación Científica.

Entre los beneficios que brindará el centro, se encuentra la mejora de las capacidades de investigación e innovación en diversos ámbitos de las ciencias: ingeniería, matemática, informática, ciencias sociales, física, química, economía, biotecnología y energía, entre otras. Además, permitirá abordar de modo eficiente problemas de alta complejidad con aplicación directa a la realidad nacional y a diferentes actores del sistema productivo.

La ministra de Industria, Carolina Cosse, subrayó la importancia de este centro, que posiciona muy bien al país en el entorno latinoamericano. “Este es un paso más en la construcción de la industria del futuro”, destacó, y afirmó que seguramente muchos servicios de Antel evolucionarán con las potencialidades que brinda este supercomputador, que tendrá una vida útil de 10 años.