Luis J. Piriz
Otro encuentro en que participaba un sudamericano fue Dinamarca-Perú, cuyo resultado era incierto, dado que ambos equipos no son considerados “candidatos” a obtener el título Rusia 2018, y que a priori, uno esperaba ver luego de 36 años de ausencia a Perú, para ver como afrontaba el reto de estar otra vez en un mundial, y con la novedad de que Paolo Guerrero pudiera jugar luego de la inhabilitación impuesta por FIFA.
El primer tiempo se fue sin pena ni gloria 0-0, con algunas jugadas de aproximación y juego férreo, y pocas otras cosas. Excepto por la decisión del VAR que otorgó un penal al equipo incaico que el propio Cueva malogró disparando a las nubes.
Pero al inicio del periodo final, se vio que Dinamarca quería llevarse el triunfo, aunque Gallesse estuvo muy atento a la hora de defender su meta.
Sin embargo, Yusufi Poulsen a los 58’ marca el gol que a la postre le daría el triunfo a Dinamarca, haciendo que Perú se fuera al frente en busca del empate que jamás llegó, aun cuando Guerrero ingresó al campo de juego luego de la apertura del score.
En los minutos finales, Perú se fue con amor propio en busca del empate, estando muy cerca de lograrlo, pero encontrando en el goalkeeper Gaspar Schmichael, que defiende actualmente al Leicester City, una verdadera muralla, dejando la sensación de que Perú debió salir a jugar de esa forma, pero no lo hizo: se ahogó en la orilla… y eso le costó “un Perú